NO TE DES POR VENCIDO
- 4D
- 16 may 2018
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Actualizado: 19 may 2018
Había una vez un joven llamado Pedro al que le apasionaba mucho dibujar. Él consideraba que sus dibujos eran buenos, pero siempre pensaba y sentía que los dibujos de otras personas eran mucho mejores y con otras técnicas. Previamente ya había participado en diversos concursos y exposiciones de arte y no obtenía las puntuaciones que él esperaba, por lo que cada vez estaba más desilusionado y su familia y amigos no le tenían nada de fe. Pedro decidió inscribirse a un último concurso en el que le ofrecían una beca a los tres primeros lugares en una prestigiosa universidad de arte en Estados Unidos de América, y si no lo ganaba, se rendiría con el dibujo. Su familia le dijo que no hiciera eso y que mejor se concentrara en otro tipo de cosas como destacar en el deporte o estudiar una ingeniería, o algo que le pueda servir en la vida y le dé para vivir. Ya que ni siquiera dibujaba tan bien y había gente mucho mejor que él.
Pedro quería ignorar los comentarios de su familia, pero se le clavaban en su mente y no se los podía sacar. Se sentía presionado, angustiado y mortificado por lo que su familia esperaba de él, porque él pensaba que había jóvenes con más habilidad y porque nadie le tenía fe en lo que más le gustaba hacer. Él no quería dejar el arte, pero estaba decidido a que, si no ganaba, sería lo último que dibujaría.
Llegó el día del concurso y Pedro hizo lo mejor que pudo. Dibujó un bosquejo de un paisaje de invierno en Los Cárpatos. Tenía miedo de que a los jueces no les agradara su dibujo y quedar en los últimos lugares, como de costumbre. Al nombrar los jueces a los primeros tres lugares, Pedro fue nombrado. Quedó en segundo lugar con una puntuación de 93 puntos solo por debajo del primer lugar por 2 puntos. Pedro estaba orgulloso de lo que había logrado. Al fin después de tanto trabajo pudo lograr lo que se propuso. Dejo sin palabras a todo aquel que no creía en él y sintió mucha satisfacción al haber ganado esa beca en la universidad de Estados Unidos de América. Por primera vez en mucho tiempo sintió una mezcla de felicidad, alivio, satisfacción y gozo.
-Orlando Reyes.
No solo el talento es suficiente. La dedicación, entusiasmo y principalmente la disciplina son la base de un buen desempeño. Puede haber críticas que lleven a la desconfianza en ti mismo pero si se tiene fijo el objetivo y el convencimiento de que se esta trabajando correctamente los logros llegan.
Es muy importante siempre seguir tus sueños y nunca rendirte. No hagas caso a lo que la demás gente diga o piense y tu concéntrate en tus metas para que las puedas lograr, porque una vez las hayas logrado, esa satisfacción y el momento de gozo por haber alcanzado tu objetivo, quedará para siempre.
Es verdad, no debes de dejar de hacer lo que te apasiona solo por el que dirán los demás, si muchos te dicen que no puedes hazle como pedro y demuéstrales lo contrario, y nunca debes rendirte, ni dejar un sueño incompleto solo vívelo y disfrútalo al máximo.
Excelente entrada...Veo que el que persevera alcanza, aunque pedro no tuvo apoyo el lo logro y creo que es un gran ejemplo. Todos deberíamos tomar este ejemplo y luchar por lo que nos apasiona...
Todos yo creo alguna vez en nuestras vidas nos hemos sentido asi como Pedro indecisos por alguna circunstancia pero yo creo que siempre debemos de creer en nosotros mismos en nuestras cualidades o gustos y ante todo confiar en que todo se puede lograr con perseverancia y actitud no importa lo que personas cercanas o lejanas nos digan uno aprende de errores y asi es la vida te caes y te levantas por eso hay que luchar por lo que quieres y si lo logras sentiras un gozo y un orgullo enorme de ti mismo